Si el proceso de lactancia ha sido realizado con frecuencia y el bebé se ha enganchado correctamente en los primeros días, empezarás a producir leche materna ya más madura. Llevará todavía un tiempo que proporcione exactamente las necesidades de tu bebé, por lo que probablemente produzcas más cantidad de leche.
Si estas produciendo demasiada leche, puedes congelarla y alimentar a tu bebé en otro momento con esa leche o incluso donarla a un banco de leche materna. Si el pecho está muy lleno y no se vacía correctamente, puede causar congestión. Masajearlo o aplicar compresas calientes puede ayudarte a aliviar el dolor y la congestión.
¿Qué pasa si no produzco suficiente leche?
La leche materna funciona como un sistema de demanda, cuanta más leche toma el bebé, más leche produce tu cuerpo. Si tu bebé está sano, no tienes motivo de preocupación. Si tu bebé no está ganando peso correctamente, quizás no se esté enganchando correctamente. Un mal enganche al pecho puede afectar la producción, ya que la succión y estimulación de la lengua de tu bebé es lo que dice a tu cuerpo la cantidad de leche que debe producir. Si la producción esta siendo escasa, la ayuda de un sacaleches puede ayudar a incrementarla.
Producción de leche materna y bienestar
La leche materna “madura” que viene tras el calostro cambia en cada toma, y también depende de tu dieta y del momento del día.
La investigación muestra que la leche extraída durante la tarde-noche contiene triptófano, una sustancia química natural que ayuda a dormir.
En cada toma, la primera cantidad de leche es muy acuosa para saciar la sed del bebé, mientras que la leche más calórica y rica en grasa, viene después, para satisfacer el hambre del bebé. Por ello es muy importante permitir que el bebé vacíe el pecho antes de ofrecerle el otro.
Alrededor de las 2 semanas, aumentará el flujo de leche para satisfacer las necesidades de tu bebé.
Cuidar a un bebé requiere energía, paciencia y calma, así que es importante que cuides de ti misma, te hidrates correctamente y sigas una dieta equilibrada. Descansa cuando lo haga el bebé (incluso si es durante el día). Puedes hacer algo de ejercicio suave a asistir a alguna clase de yoga para nuevas mamas para recargar tus niveles de energía.
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